ENGLEWOOD, Colorado — Fue una celebración costosa para los Denver Broncos después de su histórica remontada por 33-32 sobre los New York Giants el domingo pasado.
La NFL anunció el sábado que el apoyador Justin Strnad fue multado con $15,486 porque hizo contacto con el árbitro Brad Allen después de que terminó el juego. El apoyador Dre Greenlaw ya había sido suspendido por un juego a principios de semana porque había perseguido a Allen cuando éste intentaba abandonar el campo después del juego, y la liga dijo que Greenlaw había amenazado verbalmente a Allen.
Ambos incidentes ocurrieron momentos después de que el pateador de los Broncos, Wil Lutz, anotara un gol de campo de 39 yardas en la última jugada del juego para completar un último cuarto de 33 puntos para que los Broncos consiguieran la victoria. Al entrenador de los Broncos, Sean Payton, quien había dicho a principios de semana que infracciones como la de Greenlaw anteriormente sólo justificaban una multa, se le preguntó el viernes si pensaba que el contacto de Strnad con Allen justificaría una multa.
«No voy a comentar sobre eso porque a lo largo de los años he aprendido que no importa», dijo Payton. «Mi opinión al respecto no importa».
Greenlaw no jugará el domingo contra los Dallas Cowboys, y su suspensión le costará un cheque de juego – $192,778 – así como un bono de plantilla de $90,000 por juego que Greenlaw gana cada vez que está en la plantilla del día del juego. Strnad ha sido titular en la posición de apoyador interno de Greenlaw en los cinco partidos que Greenlaw se perdió por lesiones en el muslo y será titular allí contra los Cowboys, que son segundos en la liga en ofensiva anotadora, número uno en ofensiva total.
«Nada cambia esquemáticamente para nosotros cuando (Strnad) juega», dijo el coordinador defensivo de los Broncos, Vance Joseph.
El domingo fue la primera aparición de Greenlaw en un juego esta temporada para los Broncos, ya que participó en 21 jugadas y terminó con seis tacleadas y un golpe al mariscal de campo.
Los Broncos tuvieron 12 penalizaciones aceptadas en el juego para 127 yardas, incluyendo una penalización por conducta antideportiva al entrenador Sean Payton en los minutos finales del juego cuando Payton corrió al campo para expresar su descontento con Allen después de que Riley Moss fuera sancionado por una penalización por interferencia de pase.