La secretaria de prensa de la Casa Blanca de EE. UU., Karoline Leavitt, confirmó en una conferencia de prensa que Donald Trump está explorando deportar a los ciudadanos estadounidenses a las cárceles de El Salvador conocidas por sus supuestos abusos de derechos humanos.
Un periodista le preguntó a Leavitt sobre Trump durante el último fin de semana, diciendo que estaría dispuesto a deportar a los ciudadanos estadounidenses a las infames prisiones salvadoreñas con la cooperación del presidente de ese país centroamericano, Nayib Bukele, quien se reunirá con su homólogo estadounidense el lunes.
Leavitt confirmó que Trump ha discutido la posibilidad de forma privada y pública y que la idea está dirigida a «criminales atroces y violentos que han violado las leyes de nuestra nación repetidamente. Estos son delincuentes violentos y repetidos en las calles estadounidenses». El domingo, a bordo de Air Force One, Trump dijo a los periodistas: «Me encanta» la idea de enviar a los reclusos estadounidenses a las prisiones de El Salvador.
«Si él (Bukele) los tomara, me sentiría honrado de darles. No sé qué dice la ley al respecto, pero no puedo imaginar que la ley diría algo diferente. Si pueden albergar a estos horribles delincuentes por mucho menos dinero de lo que nos cuesta, estoy a favor», dijo Trump.
Los comentarios de Trump son en respuesta a Bukele, quien, durante una reunión a principios de febrero con el Secretario de los Estados Unidos, Marco Rubio, ofreció alojar en sus prisiones «cualquier delincuente peligroso que sea ciudadano estadounidense o residentes legales».
Luchando por cumplir con los objetivos de deportación de Trump
A pesar de los esfuerzos masivos de Trump para deportar inmigrantes ilegales e inmigrantes legales condenados por delitos, ya sean legales o no, los funcionarios relevantes han luchado por cumplir con los objetivos de aplicación del presidente.
Según A The New York Times informe«Al menos 27,000 personas fueron deportadas en las seis semanas posteriores a que Trump asumiera el cargo, un ritmo más lento que bajo el Sr. Biden».
El informe agrega que después de un aumento temprano en los arrestos, más personas están sentadas en instalaciones de detención de inmigrantes, principalmente porque las deportaciones se han empantilado porque se realizan a través de vuelos a varios países, incluidos Egipto, Haití y El Salvador.
La administración de Biden deportó principalmente a inmigrantes en autobuses a través de la frontera mexicana, que es más barata y más rápida, agregó el informe del NYT.